Las fuentes de Steven Spielberg

Las fuentes de Steven Spielberg

Giovanni Blandino Publicado el 10/22/2021

En muchos sentidos, Steven Spielberg es cine. Además de ser capaz de crear una obra maestra tras otra o de hacer reír, llorar y emocionarse al público, Steven Spielberg fue el que moldeó, en cierto modo, el cine estadounidense a partir de los años 70 y 80.

Pero no se quedó ahí. También creó imágenes, personajes y mundos que se han quedado grabados en las mentes de todos: el extraordinario arqueólogo Indiana Jones, los dinosaurios de Parque Jurásico, los inquietantes ataques de Tiburón o el extraterrestre por antonomasia, E.T..

Hoy, sin embargo, vamos a hablar de otros tipos de elementos icónicos presentes en las películas de Steven Spielberg: las fuentes, los títulos y las elecciones tipográficas de algunas de sus obras maestras. Y es que ¿quién no se acuerda de la tipografía tan aventurera de Indiana Jones o el extraño logotipo del parque jurásico?

Tiburón

Tiburón (título original: Jaws), se estrenó en 1975 y no es solo la película que lanzó al estrellato a Steven Spielberg en el Hollywood de los años 70 –el llamado Nuevo Hollywood– sino que también fue el inicio de un género con una inmensa suerte: los taquillazos de terror.

La primera escena de Tiburón se desarrolla en las profundidades marinas, acompañada por las inquietantes notas de la legendaria banda sonora compuesta por John Williams. La tipografía de los créditos iniciales, obra de Universal Title, recupera la fuente elegida para la primera edición de la novela Jaws, en la que se basa la película.

Imagen: http://annyas.com/

La tipografía del título principal probablemente se diseñó para esta película, usando como base una fuente con un extra de negrita en la que la «J» de Jaws se modificó para que pareciese un gancho. El resto de créditos, en cambio, están en ITC Souvenir, una fuente básica de la tipografía de los 70. Redondeada y elegante, la fuente se inspira en las fuentes que creó a principios del siglo XX el tipógrafo estadounidense Morris Fuller Benton.

En 1967, Ed Benguiat, el prolífico maestro de las fuentes, rediseñó esta fuente. Algunos la llaman «la Comic Sans de los años 70»: de hecho, la Souvenir se utilizaba de manera tan excesiva (gracias también a su optimización para la fotocomposición) y de forma tan inoportuna que pasó a ser una de las fuentes más odiadas.

En busca del arca perdida

En busca del arca perdida (título original: Raiders of the Lost Ark), se estrenó en 1981 y es la película inicial de una de las sagas más famosas del cine popular estadounidense. Además, es la que da a luz, cinematográficamente hablando, a su inolvidable protagonista: Indiana Jones.

Esta icónica tipografía que se asocia a toda la saga solo aparece en el póster y no en los créditos iniciales, en realidad. Su diseñador fue Mike Salisbury, un director de arte muy querido en Hollywood y en el mundo de la cultura pop (trabajó en Apocalypse Now y Rocky, en revistas como Playboy, videojuegos como Halo y para leyendas musicales como George Harrison), pero que solía quedarse en la sombra.

Imagen: http://annyas.com/

Seguramente, una fuente de inspiración para esta tipografía fueron los clásicos pósteres de las series de aventura, un formato cinematográfico muy de moda en los cines estadounidenses en los años 30 y 40. Actualmente, como homenaje a la tipografía, existe una fuente gratuita que se llama Adventure y que se puede descargar aquí.

Para los créditos iniciales del exitoso estreno de Indiana Jones, se eligió una tipografía menos atrevida. La fuente utilizada fue la Open Capitals Roman, diseñada en 1929 por el diseñador neerlandés Jan van Krimpen.

Cartel de «En busca del arca perdida». Imagen: socialpsychol.wordpress.com

Y ahora, ¡a disfrutar la inolvidable escena inicial de la película!

Parque Jurásico

Parque Jurásico se estrenó en 1993 y es la decimocuarta película del prolífico director estadounidense. El argumento lo conocemos todos: una isla secreta, efectos especiales muy avanzados (para la época), un parque de atracciones con dinosaurios clonados y, evidentemente, algo que sale mal.

La fuente elegida para el título de la película es una versión contorneada de la Neuland, una fuente expresionista diseñada por el alemán Rudolf Koch en 1923. Se dice que Koch grabó la fuente directamente en metal sin hacer ningún tipo de borrador previo. Seguramente por esto se ven esas inusuales formas en la fuente, que es sans-serif y entera en mayúsculas.

Imagen: http://annyas.com/

Aunque la Neuland ha acabado en la lista de peores fuentes de la historia, puedes encontrarla en distintos sitios: en el logo de la marca de tabaco American Spirit o en los pósteres de la adaptación para Broadway de los dibujos animados de Disney de El Rey León.

Atrápame si puedes

Atrápame si puedes (título original: Catch me if you can) es una animada comedia de Steven Spielberg con un reparto excepcional: Leonardo DiCaprio interpreta a un impostor profesional y un mago de las identidades falsas. Tom Hanks es el agente del FBI encargado de atraparlo.

La película, muy aclamada y entretenida, también fue muy elogiada por la maestría con la que se realizaron los créditos iniciales.

Imagen: http://annyas.com/

La secuencia de los créditos (realizados por la pareja de artistas franceses Kuntzel y Deygas) es toda una película dentro de la película, una pequeña obra de arte que nos recuerda a las creaciones de Saul Bass para las películas de Hitchcock. Aquí podéis encontrar una larga entrevista a ambos creadores.

El uso de la tipografía cinética se ha aprovechado al máximo gracias a las últimas novedades tecnológicas disponibles. Mientras suena el jazz compuesto por John Williams, no solo se persiguen las siluetas del impostor y del policía: las verdaderas protagonistas de la escena (sobre todo para los amantes de la tipografía) son las dos fuentes elegidas. La principal es la Coolvetica, una fuente sans-serif con los glifos modificados y muy extendidos. La Coolvetica es una de las tantas variaciones de la fuente Helvetica, aparece en los años 70 y se inspira en el logo de una cadena de tiendas estadounidense.

Junto a la Coolvetica, en estos créditos aparece la Hellenic Wid, una fuente slab o egipcia (es decir, una fuente con un trazo grueso y cuadrado) muy de moda a mediados del siglo XX.

Los archivos del Pentágono

Los archivos del Pentágono es un thriller político de Steven Spielberg que se estrenó en 2017. La película nos introduce en la redacción del periódico estadounidense Washington Post: estamos en 1971 y el periódico decide publicar documentos confidenciales sobre la guerra que se está desarrollando en Vietnam, provocando un fuerte conflicto con la Casa Blanca.

La fuente elegida para el título de la película es la clásica Helvetica, una de las fuentes más utilizadas del mundo a partir de los años 70: se encuentra en todas partes, desde los carteles del metro de Nueva York a los transbordadores de la NASA, el primer Macintosh de 1984 o los logos más dispares, como los de Lufthansa, Nestlé, Panasonic o Microsoft. Aquí os contamos su historia

Imagen: http://annyas.com/

.La Helvetica se suele elegir por su tono extremadamente neutral. Esta característica es la que podría haber llevado a Steven Spielberg a confiar en esta tipografía para una película que es un himno a la neutralidad y a la libertad de prensa.

Al contrario de lo que os tenemos acostumbrados, no vamos a cerrar con un clip de los créditos, sino con un momento especial de Los archivos del Pentágono para los amantes de la impresión y la tipografía: en este fragmento de la película, podemos ver cómo se reproduce fielmente la bulliciosa actividad de composición e impresión de un periódico en los años 70.

Hemos visto cómo Steven Spielberg es capaz de todo, tanto en su faceta cinematográfica como en sus elecciones tipográficas. Para sus obras maestras de los años 70, 80 y 90, las que lo han hecho famoso y querido por el público, eligió tipografías valientes, vistosas y populares. Los estilos tipográficos de Indiana Jones o de Parque Jurásico se han vuelto tan icónicos como las propias películas.

Steven Spielberg también es un director muy virtuoso, conoce perfectamente los medios cinematográficos y la importancia de los detalles gráficos. Incluso en los créditos, como los elogiados de Atrápame si puedes, por ejemplo, demostró ser uno de los pocos capaces de hacer una cosa única: darle a sus películas un aire del cine estadounidense clásico en la época actual.