Hoy queremos abordar contigo un tema realmente… ¡simpático!
Porque ¿quién mejor que las mascotas de las grandes marcas ha sabido ofrecernos momentos de trivialidad y arrancarnos unas sonrisas?
Si nos paramos un instante a pensar, nos daremos cuenta de que el número de mascotas que hemos visto a lo largo de todos estos años es realmente inmenso. Ya se trate de animales, de seres inanimados o de seres humanos, las mascotas nos han permitido aproximarnos a productos y servicios identificándolos inmediatamente gracias a su imagen omnipresente. Ni que decir tiene que, con mucha frecuencia, nuestro recuerdo de un producto o de una empresa se basa en la existencia de un animal divertido o de un personaje caracterizado de forma inolvidable.
La mascota, ese personaje a menudo caricaturesco, puede estar encarnada por una persona real, como Ronald McDonald de McDonald’s, o por un dibujo, como el conejo de Nesquik. Para dar un rostro a su diseño, numerosas empresas recurren a mascotas que sustituyan la identidad de la marca o se ganen al público. Con mucha frecuencia reconocibles, e incluso memorables, las mascotas tienden a convertirse en auténticas celebridades que pasan a formar parte del inconsciente colectivo. Se trata del elemento visual más estrechamente asociado a tu marca. Sobre todo, ¡tu mascota puede aparecer en embalajes, sitios web o perfiles de redes sociales!
En este artículo, en el que analizamos qué es una mascota y por qué se ha usado tanto en publicidad, vamos a recordar algunas de las mascotas más famosas del mundo que han quedado grabadas en nuestra memoria.
Para empezar, ¿qué es una mascota? Un poco de historia
Una mascota es un objeto o un ser vivo (animal, personaje, objeto animado) que representa a un grupo, una entidad o una empresa. La palabra mascota, utilizada por Frédéric Mistral en el siglo XIX como derivado de la palabra provenzal «mascoto», significaba originalmente «suerte». Aquí definimos la primera misión de la mascota: traer suerte. Al evitar la mala suerte, este personaje imaginario protege al grupo y trae consigo la victoria. Además de su función histórica de amuleto de la suerte, la mascota permite un proceso de identificación inmediato de psicología de las relaciones. Se trata de una herramienta muy eficaz para dar una dimensión humana y de mayor calidez a una institución, un producto o un concepto.
Según Jean-Claude Boulay (semiólogo): «Una mascota puede transmitir afecto a través de una personificación e infundir confianza creando un vínculo y una complicidad». Efectivamente, en el subconsciente del individuo, crea una actitud positiva hacia el grupo representado. Como parte integrante de la identidad visual de una marca, la mascota es ideal para promover una marca, anclarla en el espíritu de los consumidores y cobrar vida a través de distintos soportes, una historia o una personalidad.
La mascota, una herramienta de marketing muy potente
La mascota es una técnica de marketing no precisamente nueva. Con los años, las marcas pensaron en asociar su imagen, su producto y su nombre a una mascota. Mucho antes del nacimiento del marketing y cuando todavía no había Internet, las marcas utilizaban mascotas en los carteles publicitarios para evitar tener que usar una argumentación de ventas compleja o con demasiado texto: la mascota basta por sí sola. Con el tiempo y la presencia de las pantallas publicitarias, las mascotas vuelven a cobrar fuerza en el universo de las marcas. Gracias a la aplicación del efecto 3D, han aparecido nuevas mascotas con un diseño modernizado, pero que ofrecen una nueva relación con el consumidor.
Cabe señalar que las mascotas hicieron su primera gran aparición en eventos deportivos como la Copa del Mundo en 1966, con Willy. Después, llegó Waldi, creado por la diseñadora gráfica Elena Winschermann: este perro Teckel multicolor fue la primera mascota oficial de la historia de los Juegos Olímpicos de Múnich en 1972.
Ejemplos de mascotas famosas en todo el mundo
¿Te parece que tu empresa es demasiado aburrida? ¡Es hora de darle una imagen simpática! Y la mascota suele ser una solución eficaz. Una buena mascota debe ser atractiva e identificable por sus rasgos de carácter y su personalidad. Debe ser coherente con el universo de tu marca y resaltar la calidad de tu producto/servicio.
¡Veamos algunas de las mascotas más famosas!
El conejito de Duracell: un conejo rosa con una energía inagotable
Creado en 1973 por una agencia publicitaria de Nueva York, Dancer, Fitzgerald y Sample, la célebre mascota de la marca Duracell se distingue por su energía desenfrenada. Al principio, el conejito rosa se limitaba a jugar con el tambor; pero gracias a sus pilas alcalinas y altamente resistentes, ha podido practicar todo tipo de deportes: esquí, piragüismo, boxeo, maratón, fútbol… y sus proezas se han multiplicado en una saga publicitaria que ha llegado a ser un objeto de culto. En 2019, Duracell lanzó su nueva campaña «Power On» en la que ¡el conejito rosa habla! Hoy en día, el conejito de Duracell es uno de los iconos de marca más reconocidos en todo el mundo.
Ronald McDonald, el más famoso de los payasos
¡Todos lo conocemos! El payaso Ronald, de rostro blanco, cabello rojo hirsuto y traje amarillo, debutó en Washington en 1963 con la inauguración de un nuevo restaurante McDonald’s y popularizó la cadena en todo el mundo. Llegó a ser tan popular como Papá Noel , consiguiendo captar y fidelizar a numerosas generaciones de niños y adultos.
Mr. Proper / Don Limpio: nacido para facilitarte la limpieza
La historia de Mr. Proper (más tarde conocido en España como Don Limpio) se remonta a los años 50. En esa época, un tal Linwood Burton tenía una empresa que se encargaba de limpiar los buques de la Marina estadounidense (con productos tóxicos, corrosivos y peligrosos para la salud de sus trabajadores). Entonces, Linwood, que tenía algunos conocimientos de química, quiso remediar tal situación y creó una nueva fórmula capaz de sustituir todos esos productos nocivos, ¡que se haría conocida bajo el nombre de «Mr Clean»! Este señor calvo y cachas que ayuda al personal encargado de la limpieza doméstica a conseguir un suelo más brillante apareció en España en 1982 en un spot de televisión. Desde entonces, este detergente de Procter & Gamble ha perdido un poco de músculo para darle un aspecto de genio bueno del hogar.
Bibendum, el muñeco de Michelin
Más conocido bajo el nombre de «el muñeco de Michelin», Bibendum es uno de los logotipos más famosos del mundo. La idea del Bibendum, francés de nacimiento, se le ocurrió al cofundador de la empresa, Édouard Michelin, durante la Exposición de Lyon de 1894, cuando se dio cuenta de que un montón de neumáticos apilados parecía un hombre sin brazos. La mascota no fue creada oficialmente hasta 1898 por el caricaturista O’Galop, que le aportó rasgos agradables y tranquilizadores, y celebró su 120 aniversario en 2018.
El auténtico nombre de Bibendum (o «Bib», para los amigos) viene de un eslogan que se tomó prestado de las Odas del poeta Horacio, «Nunc est bibendum», o «ahora es el momento de beber». Un eslogan utilizado para decir que el neumático Michelin es capaz de hacer frente a cualquier obstáculo, en francés «boire l’obstacle» (literalmente, «beberse los obstáculos»). En un primer momento, Bibendum parece un hombre rico (con su monóculo, puro, anillo y gemelos: símbolos de la única clase social que podía permitirse un automóvil en esa época); pero, con el paso de los años —coincidiendo con la bajada de los precios de los automóviles—, se muestra mucho más cercano al público general.
Aquí encontrarás un vídeo en el que se explica la historia de Bibendum!
M&M’s, Rojo y Amarillo
Creados en 1971, los personajes Rojo (M&M’s, relleno de chocolate) y Amarillo (M&M’s, relleno de cacahuete) son auténticas mascotas para esta marca y tienen personalidad propia: estos dos amiguetes gustan sobre todo por su lado travieso, que transmite una imagen menos formal de la empresa, viviendo aventuras que de las que solo ellos pueden disfrutar y que en el imaginario colectivo están asociadas a la diversión. En el caso de M&M’s, la mascota tiene derecho a disociarse de la marca. Por este motivo, si tienes una imagen de empresa formal, puedes apostar por una mascota desenfadada y simpática que permita transmitir una imagen menos severa. Se trata de una excelente estrategia de comunicación para desarrollar el capital simpatía.
A continuación incluimos el enlace a un anuncio (en inglés) de M&M’s para Navidad. ¡Que lo disfrutes!
Las mascotas asiáticas
Estos simpáticos y rentables personajes están lejos de ser una excepción: no hay estadísticas oficiales, pero se estima que actualmente existen más de 2.000 mascotas niponas. Efectivamente, a mediados de la década de 2000, algunos lugares de interés turístico de Japón vieron en ellas el medio ideal para renovar su comunicación. En esa época, el país está en plena ola «Kawaii», un estilo que exagera los rasgos y hace parecer todo bonito, como bien saben las generaciones que leen manga. La fusión entre esta nueva moda y la antigua tradición de las mascotas es lo que da lugar a las mascotas que hoy abundan por el archipiélago. Se conocen como las «Yuru-Kyara», que significa «personajes blandos». La primera que tuvo un gran éxito es Hikonyan, un gato con casco de samurái creado en 2007 para representar el castillo de Hikone. En poco tiempo, un número incalculable de ciudades, monumentos o administraciones se suman a esta tendencia. Hay incluso cárceles con mascota propia.
Las mascotas se han convertido en una diversión en sí mismas: ahora sustituyen a algunos famosos en las portadas de las revistas y son invitadas a programas de televisión. Visto desde el extranjero, el éxito de Yuru-Kyara y los 17.000 millones de euros que genera cada año en productos derivados son motivo de inspiración e impulsan otras creaciones. Podemos citar el ejemplo de los EE. UU., que han reinventado Tom, una judía verde con gafas, para promover los estudios al otro lado del Atlántico. Pero serán sobre todo los Juegos Olímpicos de Pekín 2022 los que ofrecerán a los japoneses la ocasión para demostrar al mundo entero que ellos son los reyes de la mascota: Bing Dwen Dwen, un panda juguetón vestido de helado, es la mascota olímpica que encarna la fortaleza y voluntad de los atletas y que contribuirá a promover el espíritu olímpico.
Es difícil ver las mascotas de la NBA y pasar de largo…
Las mascotas son una tradición deportiva atemporal. Personajes como Bango (Milwaukee Bucks) y Benny the Bull (Chicago Bulls) han conquistado a generaciones de aficionados. Y en ningún caso la mascota es más atractiva ni tiene un papel más destacado que en el baloncesto profesional. La experiencia del directo en una cancha de la NBA —con su aluvión de luz, sus numerosos tiempos muertos y pausas y la proximidad de los aficionados a los estrechos límites del campo de madera dura— supone el escenario perfecto para la actuación de un artista dentro de un traje holgado.
En el caso de la NBA, la diversión siempre es una prioridad absoluta para la liga y las franquicias. No basta con tener delante los mejores jugadores del mundo: también hay que tener una de las mascotas más graciosas de la NBA para ofrecer una experiencia única a los aficionados.
Comunicar bien a través de tu mascota
Una vez que hayas encontrado tu mascota, solo tendrás que darle visibilidad para que tus clientes la acepten como propia. Es importante asociar tu mascota a tu logotipo para que se encuentre en nuestro punto de mira. Independientemente de si se trata de un animal, una figura humana, simbólica o inspirada en el propio producto, ¡la mascota aporta un auténtico «plus» en lo que a vinculación emocional y beneficios comerciales se refiere! Piensa también en integrar tu mascota en tus distintos soportes de comunicación, como embalajes, folletos, banderolas, etc. Para ello, puedes recurrir a los servicios de impresión de Pixartprinting. Además, puedes emplear el storytelling para contar la historia de tu mascota en tu sitio web. De esta forma, satisfarás a todos tus fans y ayudarás a tus clientes a sentir mayor cercanía con tu marca. Por último, para una mayor visibilidad, muestra tu mascota en tus perfiles de las redes sociales y, sobre todo, en tus banners publicitarios.
¡Tú decides cuál de las opciones prefieres!