El periodo navideño no deja indiferente a nadie.
Este influye en el estado de ánimo y nos evoca, inevitablemente, a recuerdos y sensaciones pasadas.
Cada Navidad es distinta a la anterior, pero aun así, nos hace recordar partes del pasado que nos acompañan en el presente. Es un momento que nos remueve por dentro, que estimula nuestros sentimientos, en todas sus formas, y que nos abre esa dulce puerta ligada a nuestra infancia. Y lo bonito de esto es que esa chispa interior chisporrotea a pesar de las heladas del invierno y nos calienta por dentro sin tener que encender la chimenea.
Le hemos pedido al magnífico Daniel Frost, ilustrador profesional, que nos regale su visión del periodo navideño. Un periodo en el que destacan el frío y la blancura de la nieve, pero también la cálida espera y la nostalgia. Daniel nos ha dejado entrar en su imaginación y sus recuerdos, a los que ha dado forma con ilustraciones delicadas, tiernas y de ensueño. Sus ilustraciones os van a envolver y os van a hacer entrar en calor, a pesar de que están ambientadas en montañas de nieve y luces siderales.
¡Que disfrutéis y tengáis buen viaje!
¿Podrías dedicar unas líneas para describir cada una de las cinco obras artísticas que escogimos? Háblanos de la emoción que sentiste en el preciso momento en el que las dibujabas, de cómo encontraste los conceptos y de alguna historia relacionada con ese momento o esa obra artística.
La Navidad y el invierno siempre me recordarán la magia, la maravilla y la infancia. Esta atmósfera es lo que quería capturar en estas ilustraciones. Algo que siempre recuerdo de la Navidad es cuando íbamos a recoger el árbol de Navidad.
Tuve mucha suerte al crecer y vivir cerca de un bosque enorme al que íbamos a elegir nuestro árbol. Siempre había muchos entre los que elegir y siempre me perdía. Era una tradición muy mágica y algo que siempre disfrutaba. Marcaba el principio de la Navidad para mí.
Cuando era niño, nunca podía dormir la noche antes de Navidad, la emoción era demasiado abrumadora. Así que recuerdo levantarme durante la noche para mirar por la ventana todas las luces brillantes y soñar con lo que traería el día siguiente.
Ir en trineo era algo que siempre hacíamos mucho en invierno. Daba igual cuánta nieve hubiese o el frío que hiciese, siempre montaba en trineo y me quedaba fuera todo el tiempo que podía. Me gusta el concepto temporal de la nieve, la idea de tener que disfrutarla al máximo mientras dure, ¡porque puede que ya no haya al día siguiente!
Ningún invierno y ninguna Navidad serían lo mismo sin un muñeco de nieve. Estos personajes de formas extrañas pueblan los jardines, las calles y los parques y son como una especie de compañía amigable durante los fríos meses de invierno.
El invierno es una gran época del año para maravillarse y sentir la magia. Me encantan las noches frías y los cielos despejados. Hay algo acogedor en abrigarse y salir a dar un paseo por la noche.
¿Qué te parece si nos escribes un breve resumen sobre ti contándonos quién eres, cuáles son tus pasiones, tu profesión y tus sueños?
Me llamo Daniel Frost y soy un ilustrador que vive y trabaja en Copenhague (Dinamarca). He estado creando ilustraciones de manera profesional durante 8 años y todavía disfruto inventando historias y haciendo dibujos.
Cuando era niño, dibujaba con mis hermanos, inventábamos personajes y situaciones divertidas y las dibujábamos solo para pasárnoslo bien y hacernos reír mutuamente. ¡Era genial! Me encanta la idea de poder crear un universo y compartirlo con la gente, y eso es precisamente lo que puedes hacer como ilustrador.
¡No hay Navidad sin invierno! ¿Qué sientes cuando piensas en esta pareja inseparable? ¿Qué recuerdos te vienen durante la época de Navidad en invierno? ¡Siéntete libre de ser completamente honesto!
Creo que el invierno es una época del año mágica, pero también un poco dura.Es dura porque hace más frío y hay más oscuridad, y toda la vivacidad del verano ha desaparecido. Pero el invierno tiene algo acogedor y mágico: las luces brillantes, los cielos fríos y despejados y la tranquilidad que trae la nieve.
Visualmente hablando, es una época del año muy bonita, los objetos y los colores destacan sobre fondos blancos, haciéndolos más detallados y brillantes, mientras que la niebla y la nieve crean una atmósfera misteriosa y mágica. La nostalgia es también una buena parte del invierno y, especialmente, de la Navidad. Es inevitable pensar en tu infancia y en la emoción y la anticipación que sentías en esta época del año.
Nos gustaron mucho tus últimos trabajos y hemos notado que muchos de ellos mostraban paisajes helados. ¿Por qué te sientes tan próximo a esos reinos congelados? ¿Cuál es el detonante de tu creatividad mientras sostienes tus lápices?
Siempre me ha fascinado el Ártico y las regiones polares. Me encanta leer relatos de exploradores polares y ver documentales sobre esos lugares.
Pero no fue hasta después de un viaje a Groenlandia hace unos años, que comencé a hacer trabajos basados en estos entornos. Me fascinaban muchísimo los diferentes tipos de luz, los paisajes dramáticos y la misteriosa atmósfera que estos elementos crean. Así que empecé una serie de pinturas y dibujos, tratando de capturar ese sentimiento.
Al final, estos trabajos se convirtieron en inspiración para un libro ilustrado que escribí e ilustré llamado «The Children and the Whale» (publicado por Gestalten). El libro trata sobre un hermano y una hermana que se embarcan en una fascinante aventura a través de un increíble paisaje ártico.