Table of Contents
Según el diccionario, un currículum es la “relación de los títulos, honores, cargos, trabajos realizados, datos biográficos, etc., que califican a una persona”. Esta definición no nos habla de la cruda realidad, y es que se estima que los reclutadores tardan alrededor de seis segundos en decidir si lanzan el documento a la basura o, por el contrario, le prestan una mayor atención.
Así pues, no hay segundas oportunidades. A la hora de postularnos para un puesto de trabajo, debemos pensar en nosotros como un producto de marketing. Porque, en definitiva, lo que intentamos es vender nuestra propia marca. Para ello, tan importante es nuestro bagaje académico y experiencia laboral como saber presentar los datos de forma atractiva para causar una buena primera impresión. Y la elección de una fuente apropiada es una de las claves para diferenciarse de la competencia.
Las fuentes transmiten mensajes y generan emociones
Desde hace algunos años, existe evidencia científica que demuestra que la fuente afecta a las percepciones de los consumidores sobre un producto o empresa, así como de los reclutadores sobre los demandantes de empleo. Por ejemplo, un estudio de de la Universidad Estatal de Wichita, en el estado norteamericano de Kansas, reveló en 2006 que fuentes como Times New Roman y Arial se asocian con “estabilidad”. Courier New y Georgia transmiten “madurez”, mientras que Agency FB simboliza “rigidez” y Kristen “emoción”.
Además, si la fuente es coherente con otros aspectos del marketing como podrían ser los elementos visuales (en el caso del currículum, el diseño, el formato, el estilo), es más probable que el reclutador grabe en su cerebro mensajes como “este candidato tiene las habilidades relevantes” o “inspira confianza”. La elección de la fuente tiene un gran impacto en la capacidad de contratación porque conectamos ciertas estéticas y palabras con emociones, rasgos de carácter y estados de ánimo.
Las familias tipográficas con más legibilidad
Ante la apabullante variedad de fuentes, ¿cómo saber cuál es la mejor para nuestro currículum? Los reclutadores coinciden en que, a la hora de elegir la fuente, debemos tener en cuenta, principalmente, dos factores: el profesionalismo y la legibilidad. El profesionalismo se refiere al estilo, al tono, que debe reflejar que la persona puede desempeñar el trabajo con seriedad y eficiencia. En cuando a la legibilidad, debemos asegurarnos que el currículum es fácil de leer en distintos medios: impreso, ordenadores, tabletas y teléfonos móviles.
Las fuentes se agrupan por grupos o “familias tipográficas” que tienen un origen similar y solo presentan pequeñas variaciones entre ellas, aunque pueden generar una impresión muy distinta. Para el currículum, las más recomendables son las Serif y las Sans Serif por su alta legibilidad. La principal diferencia entre estas familias es que las Serif presentan en sus extremos unos remates o colas muy característicos, mientras que las Sans Serif (Arial, Century Gothic, Helvetica, Geneva, MS Sans Serif, Tahoma, Trebuchet MS, Verdana…) carecen de este rasgo ornamental.
Cómo elegir la fuente más apropiada para el currículum
Aunque hay discrepancia acerca de cuál es la mejor fuente para un currículum, la mayoría de expertos en selección de personal suelen señalar estas como las imprescindibles:
- Arial. Esta fuente clásica es una de las preferidas a la hora de redactar currículums. Es una buena opción porque tiene líneas limpias y es fácil de leer. Sin embargo, hay quien señala que se ha vuelto lo suficientemente común como para que parezca aburrida. https://www.fonts.com/font/monotype/arial
- Calibri. Apareció a principios de 2000 como el reemplazo de Microsoft Word para la clásica Times New Roman. Se considera una opción segura porque se lee bien en la mayoría de pantallas, incluso cuando se pone en cursiva, negrita o en encabezados. https://www.fonts.com/font/microsoft-corporation/calibri
- Cambria. Otra fuente popular que toma el relevo de Times New Roman y con la que los reclutadores están muy familiarizados. Fue diseñada para que se pudiera leer bien en pantalla y también cuando se imprime en tamaños pequeños, aunque no es tan formal como otro tipo de fuentes. https://www.fonts.com/font/microsoft-corporation/cambria
- Garamond. Recibe su nombre del diseñador tipográfico del siglo XVI Claude Garamond, de ahí su aspecto inspirado en el diseño de aquella época. Tiene una personalidad distinta y es ideal para currículums académicos o literarios y para aquellas personas con muchos años de experiencia laboral. https://www.fonts.com/font/urw-type-foundry/garamond
- Helvética. Esta fuente, una de las más conocidas y ampliamente utilizada en el mundo (en especial por tipógrafos y diseñadores gráficos para logotipos de marcas corporativas), es una gran opción para el currículum porque es moderna pero clásica y fácil de reconocer. Proyecta simetría. https://www.myfonts.com/fonts/linotype/helvetica/
- Didot. Está especialmente indicada para la industria creativa como por ejemplo la moda o la fotografía, ya que, con sus trazos altos, transmite estilo y sofisticación y tiene algo de fantasía, pero continúa siendo legible. En otro tipo de currículums se puede utilizar para títulos. https://www.fonts.com/font/canada-type/didot
- Georgia. Es otra de las mejores alternativas de aspecto tradicional a la Times New Roman. La fuente fue creada específicamente para la claridad en los monitores de pantalla, por lo que se lee bien en cualquier documento digital, incluso si se envía el currículum como PDF. https://www.fonts.com/font/microsoft-corporation/georgia
- Libro Antiqua. Es una tipografía romana basada en las letras dibujadas a lápiz del Renacimiento italiano. Los reclutadores la recomiendan cuando queremos dar al currículum una sensación diferente a los diseños más geométricos de la mayoría de texto, ideal para profesionales de las artes o las humanidades. https://docs.microsoft.com/en-us/typography/font-list/book-antiqua
- Lato. Lato es el nombre de la palabra polaca para “verano”, lo cual nos da una pista sobre lo que quiere transmitir. Es muy natural y tiene múltiples estilos y grosores, por lo que es perfecta para combinar los textos y los títulos de cada apartado del currículum. Una ventaja es que es de código abierto, así que se puede descargar de forma gratuita. https://fonts.google.com/specimen/Lato
- Roboto. Si nos resulta familiar es porque es la fuente que se usa para Google Maps. Es menos formal que otras fuentes, así que no es recomendable para currículums académicos o entornos de trabajo muy formales. Es similar a otras fuentes optimizadas para web, pero tiene un tipo de letra más delgado y elegante. https://fonts.google.com/specimen/Roboto
Innovación en tipografías para currículums digitales
En la era digital, la elección de la tipografía para un currículum no solo refleja la profesionalidad del candidato, sino que también asegura que el contenido sea accesible y fácil de leer en distintos dispositivos. Algunas fuentes destacadas por su legibilidad en pantallas incluyen:
Roboto: Diseñada por Google, esta fuente sans-serif es popular por su claridad en pantallas de diferentes tamaños y resoluciones. Es ideal para textos en cuerpos pequeños o en interfaces de usuario de aplicaciones móviles.
Open Sans: También de Google, es conocida por su apariencia amigable y legible, lo que la hace adecuada para documentos digitales que se leen en múltiples dispositivos.
Source Sans Pro: Creada por Adobe, esta fuente está optimizada para la lectura en pantalla, con una excelente legibilidad en tamaños pequeños y bajo condiciones de baja resolución.
Estas tipografías están diseñadas específicamente para mejorar la experiencia de lectura digital, ofreciendo una excelente legibilidad sin sacrificar el estilo. Son perfectas para profesionales que buscan transmitir un mensaje claro y moderno a través de su currículum.
Impacto psicológico de las fuentes en los reclutadores
La tipografía seleccionada en un currículum puede influir profundamente en la percepción de los reclutadores. Cada fuente transmite un conjunto único de emociones y cualidades profesionales:
Times New Roman: Es una fuente clásica que sugiere seriedad y tradicionalismo. Es ideal para industrias conservadoras como el derecho o la banca.
Helvetica: Esta fuente sans-serif es sinónimo de limpieza, modernidad y profesionalismo. Su uso es frecuente en empresas del sector tecnológico o startups que valoran la simplicidad y la claridad.
Comic Sans: A menudo criticada en contextos profesionales, puede transmitir una falta de seriedad y profesionalismo, siendo generalmente inadecuada para un currículum, excepto quizás en trabajos muy creativos o informales.
Es crucial elegir una tipografía que no solo sea estéticamente agradable y fácil de leer, sino que también alinee el perfil del candidato con las expectativas culturales y profesionales del sector al que se postula. La elección correcta puede reforzar la primera impresión positiva y aumentar las posibilidades de pasar a la siguiente etapa del proceso de selección.
Fuentes sostenibles y de código abierto
El uso de fuentes de código abierto en currículums no solo es una elección económica, sino también un reflejo de la conciencia social y profesional del candidato. Estas fuentes ofrecen ventajas significativas:
Accesibilidad: Al ser gratuitas, permiten a diseñadores y no diseñadores acceder a herramientas de alta calidad sin costo.
Flexibilidad: Muchas fuentes de código abierto permiten modificaciones y adaptaciones, lo que favorece la personalización sin restricciones legales.
Comunidad: El uso de estas fuentes apoya a la comunidad de diseñadores que colaboran y mejoran continuamente los recursos disponibles.
Ejemplos populares incluyen:
Lato: Conocida por su versatilidad y apariencia moderna, es ideal para todo tipo de documentos.
Raleway: Ofrece un diseño elegante que funciona bien en encabezados y textos destacados.
Estas opciones no solo facilitan la creación de un currículum visualmente atractivo y profesional, sino que también demuestran un compromiso con la práctica sostenible y la innovación en el diseño.
Personalización del currículum según la industria
Seleccionar la fuente adecuada según la industria no solo refleja conocimiento del sector, sino que también mejora la percepción del reclutador sobre la profesionalidad del candidato. Algunas recomendaciones específicas incluyen:
Sector Financiero: Optar por fuentes tradicionales y autoritarias como Cambria o Garamond, que comunican estabilidad y confianza.
Tecnología e Innovación: Preferir fuentes modernas y limpias como Calibri o Arial, que sugieren eficiencia y una mentalidad hacia el futuro.
Artes Creativas: Escoger fuentes expresivas y distintivas como Playfair Display o Poppins, que reflejan creatividad y originalidad.
Sector Salud: Usar fuentes sencillas y altamente legibles como Verdana, que facilitan la rápida absorción de información esencial.
La elección consciente de la fuente según el campo profesional no solo mejora la legibilidad del documento, sino que también ayuda a establecer una conexión emocional con el reclutador, destacando el currículum entre muchos otros.
Otras recomendaciones a la hora de presentar un currículum
A la hora de elegir la fuente adecuada para presentar un currículum o una carta de presentación, tenemos que tener en cuenta otros aspectos, como por ejemplo intentar no combinar diferentes fuentes en el mismo documento. De la misma manera, hay que usar la negrita y la cursiva con moderación, solo para resaltar aspectos clave o separar secciones.
Es muy tentador incluir todo el bagaje, ya sea académico o profesional, en el currículum, pero si incluimos demasiado contenido, tenderemos a reducir la letra, lo cual dificulta la lectura. El tamaño óptimo estaría alrededor de los 11 puntos. Hay que recordar que uno de nuestros objetivos debe ser que el empleador pueda leer bien nuestro documento, por lo que cuanto más sencillo a la vista, mejor.