Entrevista a Chris Campe: sobre «lettering» y escribir libros

Entrevista a Chris Campe: sobre «lettering» y escribir libros

Jenny Zegenhagen Publicado el 9/21/2020

Chris Campe es una persona polifacética: trabaja como escritora, diseñadora, ilustradora, profesora y ponente. Todo su trabajo creativo gira principalmente en torno a un tema: ¡el «lettering»! Crear «lettering» a mano, crear «lettering» con pincel, explicar cómo crear tus propias fuentes… ¡Chris lo ha hecho todo! Documenta su proceso en sus libros y también lo explica en sus talleres de «lettering», en conferencias y a través de su muy bien cuidado Instagram (¡que sin duda te recomendamos seguir!).

Su estudio creativo en Hamburgo se llama «All Things Letters» y Chris usa la ventana del estudio para crear increíble arte en ella, como varias composiciones alfabéticas o su colaboración con otros artistas de «lettering» locales. Tuvimos la oportunidad de hablar con Chris sobre su proceso creativo para creaciones de «lettering», cómo empezó como escritora y cómo se las arregla para escribir y publicar sus propios libros de principio a fin.

Empezaste como librera, ¿qué se siente al crear tus propios libros ahora? ¿Siempre quisiste escribir libros?

Me formé para ser librera después del instituto y, mientras trabajaba en la librería, soñaba con publicar algún día un libro con mi propio nombre en él. Cuando finalmente estuve preparada para publicar mi primer libro —«Hamburg Alphabet»— diez años más tarde, me fue de gran ayuda conocer tan bien la industria editorial.

Chris Campe - Fotografía de Norman Posselt
Chris Campe – Fotografía de Norman Posselt

Siempre quise escribir, pero mi primer libro fue un libro de fotos: «Hamburg Alphabet» es un retrato de Hamburgo en forma de letreros de tiendas. Para hacer las fotografías para el libro, recorrí Hamburgo en mi bici durante medio año e hice fotos de más de 1000 letreros diferentes. En el libro hay 220, en orden alfabético. El libro cuenta la historia de la ciudad a través de sus letreros y se vuelve más valioso cada día porque muchos de los antiguos letreros ya no están.

¿Escribir libros te resulta natural o el proceso es desafiante? ¿Qué partes disfrutas más y qué partes son menos emocionantes?

Después de la formación, fui a un colegio de arte a estudiar Diseño de Ilustración y Comunicación. Dado que me formé como diseñadora, siento como si escribir fuera algo que hago aparte, como un pasatiempo, y eso es lo que lo hace sencillo para mí, a veces incluso más sencillo que diseñar.

Trabajo en todos los aspectos de mis libros: el concepto, el texto, el diseño, la maquetación y las ilustraciones. El proceso conlleva innumerables decisiones, grandes y pequeñas, y es alucinante tener una visión general de todo el proyecto. La parte más complicada es la de seguir trabajando en el proyecto de un libro que lleva casi un año terminar mientras tengo que trabajar en encargos en paralelo para ganarme la vida. Y hacer un manual de 200 páginas para diseñadores en solo un año es muy rápido.

La parte más divertida de escribir y diseñar un libro es desarrollar una idea y ver cómo evoluciona a lo largo del tiempo que estoy trabajando en ella. Normalmente, el libro se convierte en algo muy diferente de lo que tenía en mente al principio.

También disfruto escribiendo los textos del libro. Mi objetivo era escribir manuales que trataran el tema con seriedad pero que, a la vez, fueran muy divertidos de leer. Creo que muchos libros especializados están escritos por gente que entiende del tema muy bien, pero que no les gusta escribir. Para mí es diferente: dar con una buena forma de expresar algo en palabras me hace feliz cada vez.

¿Cómo fue la experiencia de escribir tus tres libros sobre «lettering»?

Cuando empecé a trabajar en mi primer libro de «lettering» —«Handbuch Handlettering»—, ya había publicado dos libros sobre Hamburgo, así que tenía una idea de la cantidad de trabajo que supone publicar un libro. Una de mis exnovias dijo: «¡Estoy tan contenta de que rompiéramos!». Estábamos juntas cuando trabajaba en «Hamburg Alphabet» y ella recordaba bien lo incapaz que yo era de hablar de otra cosa que no fuera el proceso del libro.

Lo primero de lo que me di cuenta cuando empecé «Handbuch Handlettering» era que sabía mucho menos sobre «lettering» de lo que pensaba. Sabía que tendría que investigar, pero no contaba con que iba a encontrar mucha información conflictiva sobre prácticamente cualquier aspecto de tipografía y diseño de tipos y que tendría que decidir por mí misma qué información era relevante y cuál no. Esto me estresó mucho. Estuve tensa todo el tiempo que trabajé en el libro y tenía mucho miedo de cometer errores de los que se reirían los profesionales de verdad en diseño de tipos y «lettering». Por supuesto, eso nunca ocurrió.

Mi segundo libro de «lettering» —«Praxisbuch Brush Lettering»— se benefició de la experiencia que había ganado con «Handbuch Handlettering». El libro está mejor estructurado y el diseño es más sencillo. Pero «Praxisbuch Brush Lettering» es menos personal también. En «Handbuch Handlettering» dejo echar un vistazo a mi forma de trabajar y a mi estudio. «Praxisbuch Brush Lettering» es algo más distinto y profesional, pero el texto mantiene un tono de voz accesible.

El libro más reciente que publiqué —«Making Fonts!»— fue una experiencia totalmente distinta porque lo escribí con mi colega y amiga Ulrike Rausch, quien dirige la fundición de tipos LiebeFonts. Siempre quise aprender a hacer fuentes, así que pensé que si Ulrike me explicaba lo que hacía como diseñadora de tipos y yo tomaba notas, podríamos convertir esas notas en un libro.

Escribir «Making Fonts!» también fue especial porque no dominaba el tema sobre el que estaba escribiendo. Aprendí sobre diseño de tipos a medida que avanzábamos y a la vez era autora y miembro típico del público objetivo: diseñadores e ilustradores que sueñan con crear sus propias fuentes. La colaboración con Ulrike fue muy bien, no porque siempre estuviéramos de acuerdo —¡al contrario!—, sino porque nos soltamos y confiamos la una en la otra en lo importante. Ulrike tiene las habilidades técnicas, yo sé escribir: esa combinación dio lugar a un libro que ninguna de las dos hubiera podido crear por su cuenta.

¿Cómo se diseña una pieza de «lettering», por ejemplo, para los alfabetos que pintas en la ventana del escaparate de tu estudio? Desde la idea hasta el final, ¿cómo es el proceso?

La forma en la que trabajo parece ser un proceso de «lettering» universal. Al menos sé de otros artistas de «lettering» que trabajan de esta forma y en uno de mis talleres una persona dijo: «¡Mi abuelo diseñó logos y uso esta técnica también!». Así que parece ser que esta forma de desarrollar una idea desde el boceto inicial hasta el diseño final está establecida desde hace mucho tiempo.

Cuando tengo una idea, juego con ella en algunos bocetos. Una vez que encuentro la forma de hacer esa idea funcionar, vuelvo a dibujar uno de los bocetos a mayor escala en papel transparente. Luego pongo otra hoja de papel transparente encima del dibujo inicial, copio las partes del dibujo que ya funcionan y corrijo las que no. De esta forma, desarrollo el boceto en un diseño más refinado que funcionará a gran escala en la ventana del escaparate. Para terminar, transfiero el boceto con la ayuda de una cuadrícula de líneas de guía y entonces lo pinto con pintura acrílica normal. La ventaja de la pintura acrílica es que puedo quitarla raspando cuando quiero volver a pintar la ventana.

¿Qué diferencias hay entre enseñar y diseñar «lettering»?

Hay una gran diferencia entre aplicar técnicas y enfoques creativos en tu trabajo diario y enseñarlos. Dominar una habilidad no significa necesariamente saber transmitírsela a otros. Para desglosar tu forma de trabajar en sencillos pasos que explicar a estudiantes, tienes que retroceder para que tu proceso no te resulte familiar, incluso cuando lo conoces tan bien que ya no tienes ni que pensar sobre ello.

Chris Campe como ponente en TYPO Berlín - Fotografía de Norman Posselt
Chris Campe como ponente en TYPO Berlín – Fotografía de Norman Posselt

Enseñar requiere conocer bien tu propio proceso, ser capaz de expresar en palabras por qué haces algo en la manera en la que lo haces y agrupar tus conocimientos en ejercicios que permitan a los estudiantes aprender paso a paso. Cuando eres realmente bueno en lo que haces, a veces es difícil recordar cuáles son los aspectos que más dificultades suponen a los principiantes. Por lo general, los niveles de habilidades varían dentro de un grupo y es esencial prestar atención a las habilidades individuales de cada persona y averiguar qué tipo de ayuda necesita para poder dar el siguiente paso en su proceso de aprendizaje. Creo que la enseñanza solo funciona cuando consigues conectar con cada persona individualmente.

¿Cuáles son tus libros favoritos sobre «lettering» e ilustración actualmente?

Uno de mis libros favoritos en este momento es «Spitzfederkalligrafie» de Stefanie Weigele. Stefanie explica al detalle la caligrafía de pluma puntiaguda, el diseño del libro es excepcionalmente bonito y hace que quiera sacar mis plumas puntiagudas por primera vez en años. Es el nuevo libro definitivo sobre el tema.