Tanto las empresas como los consumidores cada vez le prestan una mayor atención a la sostenibilidad medioambiental. Esta atención también está creciendo mucho en el mundo del papel y en el de la impresión. Por este motivo, hemos pensado que podría ser muy interesante hacer un pequeño análisis sobre el proceso del reciclaje para todos aquellos que están empezando a desarrollar una mayor sensibilidad sobre el tema y que prefieren optar por una opción ecológica.
Vamos a contaros cómo se recicla el papel y, para aquellos que quieran meter las manos en la masa, cómo hacer papel reciclado en casa. Es un procedimiento que puede ser muy útil en pequeños proyectos o en ocasiones especiales, sobre todo si tenéis tiempo y ganas de ensuciaros un poco las manos. ¿Y la satisfacción de escribir en un papel hecho por uno mismo?
¿Cómo se recicla el papel?
Si tenemos en cuenta que casi toda la fibra de celulosa se puede recuperar y transformar en un papel completamente nuevo, podemos apreciar lo importante que es el engranaje de partida de este proceso: si los residuos no se separan correctamente, la gran máquina de reciclaje no se enciende. Aquí la podemos ver en marcha para comprender mejor cómo funciona.
El proceso de reciclaje del papel consta de varios pasos. Los principales son:
- Recogida selectiva. Todo empieza aquí, en la diferenciación consciente de los residuos. ¿Qué tipos de papel se pueden reciclar? Periódicos, revistas, folios de la impresora, cuadernos, agendas, blocs de notas, folletos, sobres viejos, bolsas de papel, pañuelos y servilletas (solo si están sin usar), cartón, cartulina… En definitiva, cualquier papel que no haya sido tratado con barnices, aislantes plásticos o que no haya estado en contacto con sustancias aceitosas.
- Clasificación de los residuos. Primera comprobación: se examina el material recogido y se separa la fibra que es reciclable de todos los elementos que no lo son.
- Prensado y triturado. El papel que ha superado la primera comprobación se prensa y se tritura en trozos muy pequeños.
- Blanqueamiento. Usando sustancias químicas, se elimina cualquier residuo de tinta.
- Se ablanda el papel blanqueado en agua caliente para obtener un compuesto con el que trabajar.
- Segunda comprobación: se elimina cualquier residuo no deseado del compuesto resultante.
- Los puntos de contacto entre las fibras de celulosa se vuelven a unir para darle más resistencia y elasticidad al papel.
- Producción. El papel obtenido pasa a través de una «máquina de papel continuo» que procesa la mezcla y hace folios de distintos grosores y formatos.
Y así es como de un montón de papel usado, se obtienen folios nuevos para…
¿Qué se puede hacer con papel reciclado?
Tarjetas de visita ecológicas, tarjetas e invitaciones, folletos, folletos plegables, pósteres y etiquetas. En nuestras instalaciones, imprimimos muchísimos productos distintos con papel reciclado. Si tenemos en cuenta que muchos de estos productos, como los folletos y las invitaciones, acaban en el cubo de la basura (en el del papel, por favor), vemos lo importante que es tratar de reducir los residuos que producimos. Nuestros clientes que eligen la impresión en papel reciclado lo hacen porque tienen una filosofía ecologista y, si lo miramos desde el punto de vista de la comunicación empresarial, esta elección les permite transmitir los valores de sus empresas y hacerse eco de un mensaje sostenible.
Con el tiempo, el proceso de producción se ha perfeccionado hasta tal punto que, a día de hoy, un papel reciclado resulta casi indistinguible (a nivel estético y de prestaciones) de uno que no lo es. Por este motivo, podemos usar el papel reciclado para muchos proyectos diferentes. Empezad a fijaros en la cantidad de productos que van marcados con el símbolo de papel reciclado. Seguro que de algunos no lo habríais pensado nunca y que os lleváis más de una sorpresa.
Pasemos ahora de la producción a gran escala a la casera.
Cómo reciclar papel en casa
No os dejéis intimidar por la cantidad de pasos que veis a continuación. El proceso para crear papel en casa es muy simple y no necesitáis herramientas profesionales. Seguro que ya tenéis todo lo necesario en casa:
- Papel para reciclar.
- Una olla.
- Una fuente o un barreño.
- Una licuadora o batidora.
- Una esponja.
- Una red de malla estrecha o una mosquitera.
- Fundas de almohada.
Estos son los pasos para hacer papel reciclado:
- Coge todo el papel usado que encuentres en casa (ten en cuenta que el color del papel que vas a obtener dependerá del papel que escojas).
- Córtalo en trozos pequeños. Cuanto más pequeños sean, más preciso será el resultado.
- Introduce los trocitos en una olla con agua hirviendo y déjalos reposar unas cuantas horas, removiendo de vez en cuando.
- A continuación, coloca la mezcla en la batidora, añade un poco de agua y bate hasta obtener una pasta suave.
- Haz un marco para filtrar el papel y quitarle todo el agua. ¿Cómo? Coge una red plana de malla fina o un trozo de mosquitera y crea un marco con bordes con varas o trozos de madera. El tamaño del marco será el mismo que el de la hoja que vas a obtener.
- Introduce la mezcla en un recipiente con fondo, como una fuente de horno o un barreño. Sumerge el marco en el recipiente y colócalo en el fondo, de forma que quede completamente cubierto. A continuación, levántalo y tendrás una fina capa de papel húmedo en el marco. Deja escurrir el agua.
- Dale la vuelta a la capa de papel sobre una funda de almohada, coloca otra funda bien estirada encima y presiona con una esponja para absorber el agua. Quita la funda de almohada y deja reposar el folio hasta que esté seco. Esto puede llevar varias horas.
- Una vez que el papel esté seco, retíralo de la funda: ¡ya tienes listo un folio de papel!
Os dejamos también este videotutorial en el que se aclaran algunos de los pasos y en el que explican cómo embellecer el papel con pétalos y flores secas.
¿Cómo ha ido? El primer folio no se olvida nunca, aunque no se le recuerde como tu mejor creación. 😉